Me considero una persona amante de los animales (si están bien cocinados, más… es broooma). Pero también me considero una persona relativamente realista, y sé -o creo saber- que no es posible dejar a los animales campar a sus anchas.
Entre otras
cosas, porque los animales, que no son tontos, tiran a lo fácil. Y entre
perseguir un venado o comerse una oveja (por poner el caso), van a tirar
siempre a lo segundo. Por eso, considero que el que la caza del lobo quede prohibida en toda España -por el Ministerio de Transición Ecológica (¿hacia el
desastre?) y Reto Demográfico, por mayoría simple- es una mala noticia y una
mala decisión.
Y los ganaderos, que son los principales afectados, piensan igual que yo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario