Indocta como es la egabrense analfabeta en latín, parece tener al menos un discípulo, el psicópata que preside el desgobierno socialcomunista que tenemos la desgracia de padecer.
Y es que, como copió -o pidió que
le copiaran, lo que es peor- su tesis doctoral, no tiene ni refitolera idea de
economía, y se creyó aquello de que el dinero público no es de nadie. Y por eso
se gastó setenta y dos millones de euros para intentar frenar los embargos y el
default por sus impagos a las renovables.
Y luego esperará encontrar un
puesto en Europa, cuando le echemos de una patada del puesto que ahora detenta.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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