Uno de los rasgos muy característicos de los golpistas catalanes es que, obsesionados como están por su delirio, supeditan todo al mismo. Ya podrían estar muriéndose de hambre los catalanes, que dedicarían todos los fondos de que dispusieran a, pongamos por caso, la fabricación de lacitos amarillos.
O
a crear una agencia espacial regional, que planea enviar dos satélites al espacio
el año que viene (eso es correr, y no la famosa carrera espacial) con el
objetivo, dicen ellos, de convertirse en un referente espacial, en un país
digital.
Aunque, la verdad, si estos llevan en la Luna desde hace no se sabe cuánto… ¿para qué coño quieren satélites?
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