El psicópata de La Moncloa y su desgobierno socialcomunista, que tenemos la desgracia de padecer, podrán decir lo que quieran sobre la situación económica, el precio de la energía o la influencia de la invasión de Ucrania por Rusia en nuestra situación inflacionaria.
El hecho, la verdad, lo
cierto, es que España es un país dependiente energéticamente del gas ruso y del enviado por la propia Unión Europea. Situación en la que no nos encontraríamos
de no haber arrinconado la energía nuclear y tirado millones y millones de
euros en fuentes de energía que, hoy por hoy, son completa, absoluta y
totalmente ineficientes.
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