lunes, 18 de marzo de 2024

Éramos pocos y…

Cuando no era más que la líder de la oposición en la asamblea regional madrileña, Mónica MeMa ya dejó claro que lo único que tenía era una boca muy grande, metafórica y literalmente.

Sesión tras sesión, la presidente de la comunidad de Madrid le pegaba tales varapalos dialécticos que uno no se explicaba cómo volvía a por más. Si a esto le unimos que -creo recordar- cobró cantidades por un trabajo que no estaba realizando, y se benefició de una ayuda pública que criticaba que sus rivales ideológicos recibieran, nos podemos hacer una idea bastante clara del nivel de la interfecta.

Ahora, tras las últimas elecciones generales, la han promocionado, al tiempo que añadimos una sílaba a su apodo: ya no es sólo MeMa, ahora es también MiMeMa (o, por orden de aparición ante el micrófono, MeMaMi). Pero sigue siendo la misma inútil, bocachancla, comunista de siempre, que enfrentada a la realidad fracasa miserablemente.

Y en pleno déficit de personal sanitario -ese déficit que no dejaba de criticar cuando era todavía una pistolera regional-, seis mil médicos y siete mil enfermeros se quedaron sin plaza. Siempre pueden dar la excusa de que han convocado todas las plazas posibles; pero claro, viniendo de una ideología que piensa que el déficit público se soluciona dando a la máquina de imprimir billetes, no queda como muy elegante, la verdad.

¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

No hay comentarios: