viernes, 10 de abril de 2020

Coronavirus (31)

Por una casualidad (o un error: haber programado como dos entradas distintas lo que eran una sola), y para no andar corriendo todas las noticias un día (como siempre, la última razón es la verdaderamente importante), esta noticia se va a comentar apenas unas horas después de haberse producido, y no dos semanas después.
Y la noticia es, claro, la comparecencia de Sin vocales en sede parlamentaria para pedir apoyo para sus Pactos de la Moncloa. Lo que pasa es que, por un lado, los socialistas entienden que un pacto, si lo proponen ellos, equivale a sumisión mansa y silenciosa de los demás; mientras que si el que lo propone es el contrario lo firmarán, aunque sólo sea por quedar bien, para proceder después a traicionarlo a las primeras de cambio, aunque negando haberlo hecho por más pruebas que haya.
Y, por otro lado, piden apoyo mientas Adriana Lastre, con una cara de odio que producía espanto verla, se dedicaba a echar la culpa de la tragedia al PP y a la comunidad autónoma de Madrid. Es como algunas personas, que te piden ayuda pero lo piden de malos modos y lo agradecen de peores aún; tanto, que en lugar de echarles una mano te entran ganas de mandarles…a Parla.
La presidente de la Comunidad de Madrid reaccionó con rapidez para replicar a lo que llamó infundios (yo lo llamaría directamente calumnias) de Sin Vocales y Lastre, señalando -en ese estilo desacomplejado que parece ser marca de fábrica de los regidores madrileños regionales del PP, y más si son mujeres- que esos ataques se producen para eludir su responsabilidad.
Lo que no me parece bien es la exigencia subsiguiente de que se retiren del acta del Congreso los ataques vertidos contra su comunidad. Es mejor que consten. Como constan en acta las palabras del fundador del partido de la mano y el capullo, cuando profetizó que su partido se saltaría la legalidad vigente cuando la misma no le permitiera alcanzar sus objetivos.
Porque si hay un partido deslegitimado, no ya para ejercer el poder, sino para actuar en democracia, ése es desde su estreno parlamentario el Partido Socialista Obrero Español. Con todas y cada una de las letras.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

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