Uno
de los rasgos característicos del consejo de ninistros que tenemos la
desgracia de padecer en la piel de toro es que no hace más que dar bandazos. Determinar
si se deben a su propia inepcia, o bien a hacer seguidismo de los expertos de
la Organización Mundial de la Salud (lo que, la verdad, produce franca zozobra
en cualquiera con dos dedos de frente, al reflexionar acerca de en qué manos
hemos depositado la dirección de la actuación contra la enfermedad) es algo que
dejo a aquellos que dispongan de más datos que yo.
Porque
hace dos semanas exactas el (des) gobierno de España consideraba que aclarar a los españoles si deben usar mascarillas es especular. Del habla profusa,
confusa, difusa y hasta semifusa de la portacoz, que declino reproducir
aquí -dejo a Toni Acosta la tarea de parodiarla- uno no puede deducir si dicha
especulación se refería al ámbito económico o al meramente intelectual. O si
incluso podría caer dentro del de la óptica.
Por
ello, y por mucho más…
¡¡¡EL
GOBIERNO ES RESPONSABLE!!!
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