Cuando las cosas suceden, pueden suceder por dos razones: o bien, como suelo decir yo haciendo un chiste malo, interviene la flor del naranjo, o bien hay una relación de causa a efecto. Simplificando, o las cosas pasan porque sí, o pasan por algo.
Tomemos el caso del amigo de la pareja del
psicópata de la Moncloa. El que su empresa haya resultado adjudicataria de
varios contratos públicos por importe de veinte millones de euros puede haberse
debido a una conjunción astral, a que sus ofertas fueran irresistibles… o a que
el esposo de su conocida fuera el que está al frente del desgobierno
socialcomunista que tenemos la desgracia de padecer.
Yo tengo bastante clara cuál es la respuesta correcta… y estoy bastante seguro de cuál es la opinión de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, que ha destacado esa lluvia de contratos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario