Cuando
un político, especialmente si es español y de izquierdas, niega algo, el que le
escucha puede estar seguro de que aquello que niega ocurrió verdaderamente.
Es
decir, que si el Chepas niega que mantuviera una relación íntima con
Dina Bousselham, es evidente que se la benefició, pues otra cosa supondría que
sería la primera fémina que pasara por su lado a la que no se beneficiara. Debe
ser así como este sujeto entiende el feminismo, salvo que seas periodista y le
critiques, en cuyo caso lo entiende como azotar hasta sangrar.
Igualmente,
si asegura que tardó en devolverle la tarjeta de su móvil (algo que pertenecía
a la tal Dina, y no a él) para protegerla, la derivada lógica es que
quien buscaba protegerse era él mismo. Lo de que no quería someter a más
presión a una mujer de veintitantos años, por otra parte, revela una
concepción paternalista de la mujer que se compadece muy mal con esa igualdad
que rebuznan noche y día los de la izmierda.
Pero
claro, yo soy de derechas, y puede que no entienda bien tan abstrusos
planteamientos…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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