El politiqués es una jerga que consiste, básicamente, en hablar mucho sin decir nada de sustancia. Una jerga en la que las izquierdas españolas son, no ya peritas, sino doctas, tanto más cuanto más a la izquierda.
Y como en el costado izquierdo del espectro
político nacional con poder se encuentran los cocuquistas -los neocom
están más a la izquierda, pero pintan menos que un boli sin tinta, y los
etarras también, pero mandan (o les interesa mandar) sólo en Chapelandia y
aledaños-, allá que van a vomitar palabras sin sentido, promesas sin fundamento
y estadísticas sin respaldo.
Y como la tucán de Fene tiene necesidad de
hacerse notar, hace un par de semanas prometió una ruta pedagógica (concebida
como una ruta por el tiempo, átame esa mosca por el rabo) por España
para, recorriendo los puntos importantes de la geografía (ya me veo a
los no recorridos clamando Cómo, pero ¿es que no soy importante, y ‘ese’ sí?),
promocionar su reducción de la jornada laboral.
Lo que pasa es que ya anunciaron una cosa
semejante hace un año, y todavía la están esperando en Oviedo, Valencia, Cádiz,
Madrid, León, Barcelona, Bilbao, Toledo, Gijón, Tenerife, Zaragoza, Granada,
Coruña, Palma y Cáceres.
O deseando que no les visite, vaya usted a saber.
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