Si algo hay que reconocerles a los de la mano y el capullo es que tienen muy claro el orden de preferencias a la hora de destinar los fondos públicos.
Primero van sus bolsillos privados. Luego, sedar
temporalmente las reclamaciones de todos aquellos partidos (separatistas,
terroristas, golpistas, comunistas…) que les ayudan a seguir detentando el
poder. A continuación, los distintos pesebres (mediáticos, limosneros,
mamandurrias) que permiten tener a las masas apaciguadas. Y luego, si queda
algo, nos ocuparemos del resto de los españoles; que, como no les han votado,
pues la verdad es que ni merecen que se les tenga en cuenta.
Y mientras, los recursos para combatir la plaga de incendios forestales bajo mínimos y con recortes.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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