En economía hay, básicamente, dos maneras de hacer las cosas: la liberal y la incorrecta, que son todas las demás. Veamos un ejemplo práctico.
Hace diez días, la presidente de la Comunidad
de Madrid planteó que se estaba preparando una nueva Ley del Suelo, con el
objetivo de ampliar el número de viviendas en Madrid. Es de primero de
Economía: si sube la oferta, bajan los precios.
Mientras, el día anterior, el consejo
regional de gobierno de Cataluña creaba un cuerpo de cien inspectores de
vivienda para controlar el mercado inmobiliario. También de primero
de Economía: si intervienes un mercado, te lo cargas.
Se admiten apuestas sobre cuál de las dos opciones tendrá éxito y cuál será un fracaso sin paliativos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario