Todavía no se ha dado el caso, pero ya hace mucho tiempo que dije que si el pactar con la derecha fuera el único modo para el psicópata de la Moncloa de seguir durmiendo sobre el colchón que se apresuró a cambiar -e incluso sólo para seguir disfrutando de las gabelas del cargo-, pactaría sin dudarlo un solo instante.
Mientras tanto, pacta con quien le da los votos
que necesita para seguir detentando el poder, aunque el pago sea a costa de
España y de los españoles. Y si para ello tiene que ampliar la plantilla de la
policía regional catalana hasta veinticinco mil individuos al final de esta
década, aunque los sindicatos policiales señalen que tal hecho supone un grave peligro para la seguridad nacional -además de que se les quitan competencias,
se dota de todo lo que necesitan a los cuerpos regionales y se les paga un
sueldo superior-, pues se hace y santas pascuas.
Total, a Sánchez qué más le da.
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