Cuando el psicópata de La Moncloa pegó el volantazo en relación con la postura española sobre el Sáhara Occidental, desde el desgobierno socialcomunista que tenemos la desgracia de padecer se afirmaron dos cosas: que se hacía en interés de España, y que las relaciones con Argelia no se verían afectadas.
Vamos a suponer, que es
mucho suponer, que desde el consejo de ninistros se estuviera siendo sinceros,
tanto en la motivación del cambio como en el pronóstico que se hacía en
relación con el futuro. Pues bien, es complicado meter más la pata.
Porque desde entonces, ni un solo buque metanero ha llegado a España desde Argelia. Por otro lado, la
inmigración ilegal -el principal arma que el moro gurrumino emplea contra España-
se ha disparado en Canarias, Ceuta y Melilla desde que Pierre Nodoyuna
se bajó los pantalones ante el emir de los creyentes.
Lo malo es que le están sodomizando en el culo de todos los españoles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario