La izquierda ha utilizado la presunta irregularidad fiscal -¿recordamos que la presunción de inocencia rige para todos?- de la pareja de la presidente de la comunidad autónoma de Madrid para arremeter contra Isabel Díaz-Ayuso.
Sin embargo (la adversativa es una licencia
estilística, casi había que decir por consiguiente), mantienen la boca
cerrada cuando casos más graves ocurren en otras comunidades autónomas si los
afectados son de su cuerda, y no de la contraria.
Porque se ha descubierto que Timo Puch subvencionó desde el consejo regional de
gobierno de Valencia el reportaje fotográfico de la boda del socio de su hermano, y los de la mano y el capullo han callado como pu… ñeteras gallinas. Porque
se ha probado que el chalé del hermano del antedicho Timo Puch se pagó con subvenciones, y el psicópata de la Moncloa sigue persiguiendo a Ayuso.
Esto hace que lo de las pajas y las vigas parezca una leve afección oftálmica.
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