El desgobierno socialcomunista que tenemos la desgracia de padecer tiene tendencia -tanto más cuanto más comunista-, no a poner el carro delante de los bueyes, sino a decir que tenemos que viajar en un carro tirado por bueyes sin indicar dónde están el carro ni los bueyes y, probablemente, sin tener ni refitolera idea de qué es un carro o qué aspecto tienen unos bueyes.
Pasa por ejemplo con la llamada ley de
Bienestar Animal, que impone a los ayuntamientos, tengan el tamaño que tengan,
la gestión de las colonias felinas o la atención sanitaria y clínica a mascotas
durante las veinticuatro horas del día.
Teniendo en cuenta que en España hay más de ocho mil ayuntamientos, pero sólo doscientos cincuenta veterinarios municipales (ya hago yo la división: uno para cada treinta y dos municipios), la cosa va a estar como complicadilla…
No hay comentarios:
Publicar un comentario