Decía Churchill que un fanático es alguien que no puede cambiar de opinión y no quiere cambiar de tema. En materia del sedicente y pleonásmico cambio climático, los fanáticos abundan.
Y esto es así sean zotes o lumbreras, gente de
la calle o presuntos expertos. Así, un experto climático (será
en el plano teórico, porque en cuanto a experiencia práctica, no más de los que
sean de su generación, y menos de los que sean mayores que él) ha defendido que
la DANA que ha asolado el Levante español es una oportunidad para acabar con los coches.
Pues nada, si se ofrece él a llevarnos a todos de un lado a otro, por mí no hay problema…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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