Cuando la Yoli, demostrando que la izquierda española está formada por una panda de incultos por mucho título que tengan, dijo aquello de que había que dejar de pensar en la patria para empezar a hacerlo en la matria, lo que pensé fue, más o menos, que ya estaban los giliprogres con sus estupideces habituales.
Pero luego salió el (presunto)
prevaricador Tezanos, ese que ve al PSOE subir cuando todos los demás lo ven
bajar, defendiendo que las desigualdades surgidas en España, sobre todo a raíz
de la pandemia, hacen que esté apareciendo cierta demanda del Estado matria,
cercano y cuidador, frente el Estado patria, el que pone orden,
y más identificado con la autoridad.
Hasta aquí, todo bien (o no
demasiado mal): no deja de ser la habitual verborrea de la izmierda,
llena de conceptos pomposos y palabras vacías. Lo malo fue cuando señaló que en las últimas encuestas del instituto demoscópico se está produciendo un aumento
de la necesidad de más Estado, en comparación con estudios anteriores,
de un Estado más activo y comprometido.
Y esto sí que tiene verdadero
peligro. Porque los liberticidas del desgobierno socialcimunista que tenemos la
desgracia de padecer están en esa línea de controlarlo todo y a todos. Pero con
semejantes declaraciones, parece que encima van a querer venderlo como
respuesta a una pretendida demanda social.
Pues a otro perro con ese hueso, porque con esa rueda de molino yo no comulgo: el Estado que más ayuda es el que menos estorba.
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